La
situación caótica que vive el mundo no hace presagiar nada
bueno. Vivimos en un ambiente prebélico donde todo es posible,
en un mundo donde prevalece la ambición política, la corrupción,
la falta de ética y principios, donde la ley que impera es la
del mas fuerte y el mas poderoso. Donde los líderes mundiales
son tramposos, mentirosos, embaucadores y corruptos, con un inmenso
afán de poder y poltrona. Desde esta perspectiva de nada sirve
apelar a la diplomacia, a la integridad moral y personal de los
gobernantes, a los tratados de derechos humanos, ni siquiera a
la compasión y la humanidad, porque la barbarie, la codicia, la
falta de piedad y la ambición personal se ha adueñado de los que
gobiernan el mundo. Lo que esta claro es que en sus diabólicas
maquinaciones y oscuros planes, los ciudadanos no cuentan para
nada. Nadie parece querer la Guerra, pero todos echan leña al
fuego para avivarla. Por desgracia, la situación con el tiempo, irá a peor,
porque la lucha ya ha saltado del espacio democrático y se está
desarrollando en plena selva. "Salvese
el que pueda". |