Ciencia  y Religión


La ciencia sólo puede ocuparse de un nivel de la existencia, la existencia física. La ciencia se basa también en el estudio de lo que pasa en el tiempo y en el espacio. Por consiguiente, el científico se acerca al principio, pero no puede llegar al comienzo propiamente dicho pues éste se encuentra más allá de la existencia material y de las dimensiones espacial y temporal. En cambio, la mayor parte de las religiones —con excepciones, como el confucianismo— se han ocupado del origen del universo, pero con la única aseveración intemporal y falta de autenticidad de "Que sea, y fue", entendiendo que la ciencia encontrara las huellas de la sabiduría en Dios y su creación, cuyo concepto se basa únicamente en la fe (cree en lo que no sabes ni ves), que contradice la racionalidad de la ciencia, con lo que divergen eternamente.
 

Si el 70% de los científicos se declara ateo es porque es muy difícil compaginar  la razón y la fe, porque la ciencia trata de la materia, realidad, lo cierto y la religión de la fantasía,  lo incierto y lo sobrenatural.

Si bien es cierto que la religión con su pseudociencia ha sido siempre enemiga de la razón y el progreso, la ciencia no puede entrar a discernir lo que está fuera de una explicación lógica y coherente.

La ciencia argumenta que la existencia de Dios es muy improbable, la fe un concepto absurdo que supone la renuncia a pensar y discernir y la religión se ha demostrado como insana e irracional, ya que los relatos (como la existencia de ángeles, o las vírgenes que esperan a los muertos de la Yihad), inventando paraísos, milagros y demonios, creando una pretendida creencia o "fe" sustentada en algo ilusorio y mítico que consuela, pero que  suponen un desafío al sentido común y un desprecio a la inteligencia del ser humano.

Por eso las religiones han sido especialmente críticas con la ciencia e incluso han impedido su avance. Son conocidas las posturas de la Iglesia Católica Romana frente a científicos de la talla de Galileo, Darwin e incluso más recientemente Teillhard de Chardin.

Pedir como se ha pretendido  que coexistan religión y ciencia  para un enriquecimiento de los valores y progreso humano y bien de la humanidad, creo que es un error ya que el aceite no se fusionara jamás con el agua, al igual que lo material con lo inmaterial y a lo largo de la historia se ha revelado como algo inalcanzable, pues no se puede lograr un avance espiritual, si este no esta sustentado sobre un avance social.

Y todos los intentos no han conseguido solucionar los tópicos más importantes de la frontera entre religión y ciencia, como por ejemplo en el mundo médico la forma en que las diferentes religiones tratan temas como la clonación, la terapia génica, e incluso la eutanasia o la buena muerte.

Sin embargo si hemos de analizar porque tantos seres humanos creen en ideas tan absurdas, si estas narraciones religiosas no resisten un mínimo análisis racional. Sencillamente porque desde un principio se dio por bueno la religiosidad que daba aliciente y consuelo a los seres que se encontraban perdidos y sin encontrar un sentido a sus vidas, incrementando su confianza, atenuando el miedo y la angustia psicológica y generando conductas altruistas, que por desgracia fueron aprovechadas por grupos ( instituciones) sin escrúpulos en su propio beneficio, configurando las religiones y mas tarde las Iglesias.

Y sin embargo estos beneficios que obtienen los seres humanos de la religión, están sustentados sobre bases y principios falsos, lo que significa que a medida que va desapareciendo ese miedo, esa angustia y el ser humano adquiere un nivel de cultura y seguridad, va prescindiendo de esa religión, como esta pasando actualmente; eso esta demostrado ya que en los países mas desarrollados y cultos, el numero de ateos no solo entre los científicos, sino entre la población civil aumenta considerablemente en relación con los países del tercer mundo, lo que cuestiona de forma tajante, aquellos discursos bienintencionados que armonizan ciencia y fe.

Esto significa que aunque el ser humano sea propenso a la religión, a medida que avanza su ciencia, cultura y formación intelectual se va alejando de ella.¿Como sino se explica que el 94,7% de los científicos se declare ateo? Y de forma abrumadora rechazan la existencia de entidades sobrenaturales y la creencia en el alma inmortal.

Podíamos decir que donde reina la Razón, Dios se retira? No del todo, ya que la Razón debe ir acompañada de la formación, información, cultura y ciencia, aspectos que concurren en todos los intelectuales, proclives a considerar las religiones como un conjunto de normas sociales y morales en un concepto espiritual, que intentan compaginar con un mundo material, y que a la vez les alejan de la verdad, la razón,y la realidad.

Es cierto que las ciencias y las religiones son enseñanzas que imparten conocimientos, que no se invaden unos a otros,  como la metáfora del agua y el aceite. La diferencia es que una se sustenta sobre el estudio y la realidad  y la otra sobre la invención y conceptos ilusorios.

Lo evidente entre estos dos conceptos, "ciencia y religión" Científico y Teólogo" sin ser enemigos hostiles, es que son como dos líneas paralelas que siguen su camino, pero no llegan a encontrarse jamás, al no existir puntos de concordancia que sustenten una u otra, a pesar de la ayuda de la filosofía, que se ha entrometido para complicarlo más, al desviarse de la racionalidad empírica.

 

fenix

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