PAREMOS A CATALUÑA
NOS LLEVARA CATALUÑA A UN NUEVO ENFRENTAMIENTO CIVIL ENTRE ESPAÑOLES?
PONEMOS FRENO A SUS DISPARATADAS DEMANDAS?
España no puede tolerar ya mas, la irresponsabilidad, negligencia y temeridad de Cataluña
Las causas de la guerra civil que enfrentó a nacionales y a republicanos han sido objeto de gran debate debido a esa tendencia a enredarlo todo que solemos tener.
Debemos constatar que la guerra no es más que la continuación de la política por otros medios.
En realidad no hay una causa, sino muchas. Las guerras civiles, los españoles lo sabemos bien, no estallan de buenas a primeras, sino cuando el barril está repleto de pólvora y cien manos aplican fuego para que estalle. Las guerras civiles son el triste y sanguinario desenlace de mil errores acumulados a lo largo de años y de los intereses de unos y otros, quienes quieran que sean, que llegado el momento crítico, la reciben como el paso definitivo hacia su victoria.
El trasfondo político en que se desenvuelve España en estos momentos tiene claves muy concretas, pero muy semejantes a las anteriores, pero que en todos los casos y con todos los gobiernos, siempre han girado en torno a Cataluña.
El
despropósito del Referéndum, para que Cataluña sea considerada como Nación
independiente esta colmando el vaso de muchos españoles.
Todos sabemos los efectos negativos que para el conjunto de España ha ejercido la presión nacionalista, que como ciclón político a amenazado a toda España y tiene como rehén a Rodríguez Zapatero.
Y esto no se debe ni puede permitir, pues los niveles alcanzados en sus disparatadas pretensiones, ya ofende al resto de los españoles
Los Sucesivos gobiernos, pero con mas intensidad, han sido siempre rehenes de Cataluña que como factor bisagra ha chantajeado continuamente al estado español, exigiendo contrapartidas que siempre han perjudicado al resto de los españoles.
Es cierto que en nuestra guerra civil concurrieron otras circunstancias, que respondían a problemas no resueltos en la sociedad española, pero que se asemejan de forma alarmante a las que vivimos en estos momentos, como el tener una economía atrasada, una oligarquía terrateniente, una estructura social con una diferencia abismal entre ricos y pobres y una polarización de la sociedad en dos bandos, la derecha y la izquierda entre las que existía una fuerte tensión.
Una de las principales y en la que coinciden la mayor parte de los interesados en la guerra fue la división existente en el terreno ideológico de los españoles, aumentados por pasiones muy fuertes.
La oligarquía financiera veía con preocupación la reforma de impuestos, mientras que la falta de empleo y la solución a los acuciantes problemas económicos desesperaba a los desempleados, que veían como el capital paralizaba sus inversiones y la iglesia se sentía amenazada por la política anticlerical de la izquierda.
Ahora traslademos esta situación al momento actual y podremos comprobar con consternación que se da el momento ideal para otro pronunciamiento.
Ahora con el sistemático abuso de las Autonomías, pero sobre todo Cataluña, la tensión entre las fuerzas sociales, esta a falta solo de un incidente, para que provoque un estallido, con la consiguiente dificultad por parte del Gobierno para mantener el orden público y la violencia.
Lo que esta ocurriendo en Cataluña es ya lo suficientemente grave como para no tenerlo muy en cuenta.
Para mas INRI acaba de producirse un hecho que no pasa desapercibido para los analistas de la historia y es de la concurrencia de la Falange con los independentistas catalanes en el día del referéndum en una población insignificante. Que pasara cuando se haga a nivel Autonómico? Que el clima terminará por crisparse y esperarse lo peor.
La división de España, a raíz de las Autonomías, ha dado alas, para que se ensalcen los nacionalismos y cada una quiera ser totalmente independiente del resto de España, llegando en el caso de Cataluña al despropósito, esperpento y malicia, al pretender erigirse como nación y pretender independizarse de España, rompiendo la unidad de la misma, hecho que no se debe permitir bajo ningún concepto.
LA reivindicación de un nuevo Estatuto de Cataluña ha sido una suma de despropósitos. La Constitución no puede aprobar de ninguna forma un estatuto cuyo programa político de un nacionalismo exacerbado, pretende ser una nación independiente de España. El chantaje a que ha sometido a los diferentes gobiernos le ha hecho participe de beneficios que no tienen otras autonomías, aumentándole el techo competencial por encima del desarrollado y sobre todo porque el nuevo estatuto que se pretende choca radicalmente, al pretender un estado soberanistas, que siempre será un factor de desestabilización política.
Si a esto le añadimos el de un Rodríguez Zapatero, que por su escaso electoralismo para gobernar, necesita de su apoyo en el parlamento para poder Gobernar, prometiendo apoyar cualquier propuesta del gobierno de Cataluña, sumaremos despropósitos que no pueden tener un buen final, cuando al evidenciar que siendo España una Nación, una de sus autonomías quiere ser un estado independiente, conduciéndonos a un modelo de estado que no es viable si no se reforma la constitución, diferenciarse de lo español para afirmar una supuesta identidad propia que debe traducirse en concesiones y beneficios políticos y económicos en perjuicio del resto de España.
Esta claro que el nacionalismo catalán esta acampado en España con la determinación de convertirse en una nueva nación, dentro de España, pero independiente y este tremendo despropósito que generara diferencias inasorvibles en otras comunidades, no puede tolerarse de ninguna manera, ya que dividiría España causando un perjuicio enorme, pues la anularía como nación soberana Y España necesita ser Una si quiere ser Grande y Libre.
“Para ello se necesita una mayoría responsable y sin hipotecas políticas que pagar. “
