Lamento ser agorero pero esta claro que la situación nos arrastra cada vez hacia una pendiente mas pronunciada, si no corregimos el actual estado de nuestra economía. El Presidente del Gobierno se ve incapaz de controlar la situación y el gobierno da bandazo tras bandazo, sin saber muy bien a que atenerse.

España comienza a ser una amenaza inminente para la zona euro, hasta el punto de que en dos años se podría producir la "ruptura de la Unión Monetaria". El problema es que,  por su tamaño, España representa una amenaza mucho mayor para la zona euro, ya que es la cuarta economía más grande de la Unión y tiene la mayor tasa de desempleo y un sistema financiero que se debilita por momentos. "Si Grecia cae es un problema para la zona euro", pero si lo hace España "es un desastre".

Como  difunden los medios de comunicación, cada vez  nuestra situación se parece mas a la del gobierno de Grecia, que están a un plis  de presentar suspensión de pagos

Pronto de seguir así tendremos que llamar al FMI, para que acuda al rescate de la maltrecha economía española, lo que significara un recorte profundo en las prestaciones y el estado del bienestar.

La situación esta clara, o el presidente toma medidas para  reducir el gasto publico, sin perjudicar a los mas pobres de la sociedad, y otras medidas complementarias (sobre todo controlando a la banca) o sin mas dilación debe convocar elecciones. No hacerlo significaría prolongar la agonía de la economía española hasta que explote y quiebre y los españoles no nos merecemos esto, que hay muchos millones de pensionistas que han trabajado toda su vida cotizando a la seguridad social, para que por una mala gestión, se vean privados de su derecho asistencial, de sus pensiones, de su medio de vida. Esto seria una catástrofe que hay que evitar por todos los medios y hay que empezar a hacerlo ya.

Si la austeridad de la administración publica, es una  obligación en tiempos de crisis, hoy por hoy brilla por su ausencia y no se trata de congelar los sueldos de los funcionarios, sino de prescindir de todo aquello que no es necesario en la administración publica, evitar el despilfarro, el fraude, el blanqueo de capitales y la corrupción, concienciar al empresario que solo si hay puestos de trabajo y salarios, el mercado de autoabastecimiento y consumo seguirá funcionando, y regular de forma drástica la inmigración.

Si es necesario, poner en practica los microcréditos, que de oxigeno para no asfixiar al pequeño y mediano empresario y sobre todo a las familias y en este aspecto las entidades financieras pueden colaborar para que con una micro ayuda generalizada, se pueda ir construyendo el cimiento de una economía que empiece a emerger de forma paulatina pero sólida.

¿Porque las medidas impopulares siempre tienen que sufrirlas los que menos tienen, los menos protegidos de la sociedad? ¿Porque nunca una medida que afecte a la banca y el capital? Al final tendremos que intervenir la industria y la banca?

El problema es que la situación exige  aplicar duras y profundas reformas estructurales para corregir la situación, reformas que ahora mismo afectan directamente a los salarios, flexibilización del trabajo o y prestaciones sociales y pensiones , algo que choca de  frente con la filosofía de los españoles, bastante castigados ya  por las prestaciones que reciben que son las mas bajas de Europa. Pienso que aquí no está la solución.

Se impone una revisión de los planteamiento de forma urgente y el mejor es convocar elecciones generales.

Sr. Presidente es hora de hacer una reflexión (ya no se trata de mantenerse en el poder) y pensar en tomar la decisión mas oportuna para salvar a España de la quiebra. Cuanto antes mejor.
Se impone de forma urgente un debate ideológico en el que los dos partidos mayoritarios  establezcan un pacto mutuo y de colaboración para buscar una solución que levante a España de una crisis que nos puede arrastrar a todos